liveratum

lunes, octubre 02, 2006

Historias Intergalácticas

Weno pues publico una historia que se me ocurrió cierta tarde de Domingo bastante haciaga ...
Está insipirada, en el juego on-line Ogame .


Un leve resplandor, teñía la habitacion de rojo parpadeando a intervalos ritmicos y constantes. Una figura se movía apresuradamente por la estancia, entre la penumbra.

- Murray !!!
- Uhg?!!
- Murray despierta
- ¿Que ... ?

- ¿ No lo oyes ? - un constante y repetitivo sonido, retumbaba por toda la habitacion.
- ¡¡ Dios !!, ¿pero que coño pasa aquí?, ¿que haces tu en mi cama?
- Valiente Cabron, ¿como te atreves a preguntarme eso despues de lo de anoche?
- Dios mio mi cabeza !!! - Un fuerte dolor recorria la cabeza del teniente Murray McAllaghan - ¿anoche?, anoche me fui directo pa la piltra !!!
- Y una mierda, estuviste bebiendo hasta ...
- ¿Estuve? - su voz no sonaba como una mera pregunta, más bien parecia una burla
- Bueno ... estuvimos - las mejillas de la Jefa de escuadrón Sarah Richads, se volvieron levemente rojizas - eso no tiene importancia.
- Yo diria que si
-Al cuerno, no tengo que darte explicaciones de lo que hago o dejo de hacer.
- ¡ JA ?, pues yo creo que si una mujer, aparece totalmente desnuda en mi cama, y yo no recuerdo haberme acostado con ella, debería darme explicaciones claras y concisas de lo que sea que haya pasado ¿no?

Sarah se quedo mirando con cara estupefacta y totalmente paralizada

- Eres gilipollas Murray
- Yo tambien te quiero - Tornó su rostro en una mueca, como queriendo lanzar un besito, pero lo unico que pudo ver fue a Sarah salir corriendo de la habitacion en dirección al hangar.

- Sarah espera !!!

Sarah pretendía llegar al hangar antes que sus compañeros de flota, no le entusiasmaba la idea de recibir vaciles, guiños y risitas delante del Comandante ... por dios ¿como podía haber pasado?, ella, piloto de caza, con una prometedora carrera por delante, se había acostado con uno de los peores tipos que se pueden encontrar en la estación espacial ... Ella con ¿Murray?, joder tenía que ser un mal sueño.

Al doblar la ultima esquina, justo antes de llegar al hangar, se dió cuenta de que todos los barracones del ala C, estaban vacíos. Eso significaba que ella era la ultima.

-Sarah espera joder !!!

No, peor. Mucho peor, el ultimo era Murray. Decidio esperar a Murray justo a la puerta de entrada del hangar. Sería bochornoso ser la ultima, pero todavía lo sería mucho más, si el ultimo en entrar fuese él con una sonrisa de oreja a oreja.

- Menos mal, casi echo los higados - tosió levemente
- Nos estan esperando ¿sabes?
- Tranquila, la flota no partirá sin tí - en su cara se dibujaba una sonrisa maliciosa - eres la Jefa de escuadron ¿no?, no pueden partir sin tí
- Tu tambien fuiste el jefe de escuadron, y te recuerdo que ahora la flota parte SIN TI !!! - la sonrisa desapareció de su rostro lentamente, como recordando quien era ahora, y a lo que se dedicaba.
- Entra tu primero
- Vaya, ¿serás capaz de soportar semejante deshonrra?
- ¡¡¡ Entre ya Teniente, es una orden !!! - las palabras brotaron de su boca con dureza, quizas con demasiada, pero la situación empezaba a sobrepasarla.
- No pertenecemos al mismo escuadron, no tengo por que acatar tus ordenes
- Teniente, si no obedece mis ordenes, me veré obligada a informar al Comandante de su desobediencia.
- ¿y que le dirás?, ¿que no quise cruzar un maldita puerta antes que tu? ... que te jodan.

Empujó la puerta y entró en el hangar, justo al tiempo que un coro de voces varoniles estallaba en un fragor de vitores y silbidos, dignos de las razas mas subdesarrolladas. Aclamaban la virilidad de Murray, hacian gestos obscenos con las manos y la boca y movian las caderas emulando el acto sexual, como si se tratase de una absurda coreografía. Mientras, Murray asentía con la cabeza e iba saludando a todos los pilotos, en un paseo triunfal. Sarah no podía creer lo que estaba sucediendo, ni en sus peores sueños habría imaginado un espectaculo más dantesco y bochornoso, que el que ahora sucedía ante sus ojos.
Afrontó la situación con valor, y se decidió a entrar. Un silencio sepulcral se adueño de todo el hangar, la bravuconería y los gestos obscenos dieron paso a las risitas y a los susurros.

- Teniente McAllaghan y Capitana Richards, llegan ustedes tarde - La voz del Comandante sonaba dura y clara - es especialmente grave su retraso teniente McAllaghan, sabe perfectamente que su flota siempre es la primera en partir.
- Lo sé señor, siento el retraso, pero no pensé que ...
- ¡¡¡ SILENCIO !!! - el Comandante avanzó con grandes zancadas, y dejó su rostro a escasos milimetros del de Murray, pudiendo oler, el apestoso aliento a alcohol, que desprendia el teniente - he tenido que enviar el grueso de "SU" flota, comandada por el cabo Sando, ¿y sabe por que?, por que el incompetente de su teniente, no fué capaz de levantarse a tiempo.
- ¿Mi flota ha partido?, ¿y lo ha hecho sin mi?
- Eso es exactamente lo que le estoy diciendo teniente, asi que si no es mucha molestia ¡¡¡ PIERDA EL PUTO CULO CORRIENDO HACIA ESOS RECICLADORES Y TRAIGALOS DE VUELTA LLENOS DE RECURSOS !!! - el Comandante mantenía uno de sus brazos levantado y señalando hacia una esquina del hangar. Por lo visto se habían podido construir 15 naves mas de reciclaje, para ser enviadas al campo de escombros que se produciría tras la batalla.

Sin mas rodeos Murray corrió hacia las naves. Otros 14 pilotos, recien llegados de la escuela, esperaban junto a sus respectivas naves.
- Perfecto - pensó Murray - encima tendré que hacer de niñera - Daba la sensación que desde la última derrota, en la escuela de batalla se apresuraban a licenciar a los pilotos, siendo estos cada vez más jovenes e inexpertos, que en tiempos anteriores.

- Vamos niñas !!! - bramó Murray - ¿a que cojones estais esperando? subid a esos putos reciclas y ponedlos a volar ... ¡¡¡ vamos, vamos, vamos !!! -

Las ordnes estaban en el tablón, como siempre, anotadas en una hoja de papel. Dios mio, con tantos avances tecnológicos y todavía se utilizaban metodos de trasmision de datos, de hacía 4 siglos.

Subió a la nave, introdujo los datos en el ordenador y apreto la tecla de envío. Un instante mas tarde, en las pantallas de los otros 14 recicladores parpadeaba la orden para aceptar las coordenadas.
Una voz sonó por el intercom.
- Señor si me permite ... - Casi al mismo tiempo se escucho la voz de Murray.
- A ver nenazas, vamos a salir cagando leches de aquí, el grueso de la flota que comando, ha partido hace 20 minutos y ya no creo que les demos alcance, así que, estad atentos a las ordenes que aparezcan en vuestras pantallas, hacedme caso en todo y os traeré de vuelta a tiempo para la hora de la merienda. No quiero ni interrupciones, ni conversaciones estupidas, así que cierro el intercom. Corto.

La cabeza todavía le daba vueltas, gracias a la tremenda resaca que estaba padeciendo. Derepente cayó en la cuenta que no estaba pilotando "SU" reciclador, si no uno nuevo recien salido de fabrica. - Mierda - pensó - la botella. - Tendría que hacer todo el viaje sin ninguna reserva de alcohol que le ayudara a estar despierto. Desde su degradación, el brillante teniente y ex-jefe de escuadron de cruceros, Murray McAllaghan, se había dado a la bebida, de una forma brutal. Se pasaba la mayoría de los viajes bebiendo bourbon y hablando con su droide de mantenimiento, el único al que no parecia importarle que se pusiera demasiado pesado cuando estaba borracho.

La flota de recicladores partió hacia el campo de escombros. Pusó el navegador automatico a la nave y se inyecto un analgesico de accion rapida directamente en la arteria femoral.
- ¿Te apetece una partida de ajedrez Murray? - era la voz metálica del droide la que hablaba.
- No Tarko, prefiero dormir un par de horas
- Como desees Murray

Derepente todo se volvio confuso y borroso, se puso de pie en la cabina de la nave, pero sus piernas no fueron capaces de soportar el peso de su cuerpo. Extendió el brazo buscando algo a lo que poder agarrarse, y topo con el frasco que se acababa de inyectar. Tras un esfuerzo sobrehumano para mantener la consciencia, leyo lo que ponía en el frasco "Morphine".
- Joder lo que me faltaba
- ¿Como dices Murray?

Despues cayó inconsciente

- Murray !!, Murray !! Estamos debajo del campo de escombros, Murray ¿te encuentras bien?
- Dios mío ... no, no me encuentro bien.

Murray se llevó las manos a la boca, y salió corriendo hacia el area sanitaria de la nave, tropezando praticamente con todo lo que se encontraba a su paso. Una vez en el servicio vomitó bilis durante un buen rato.

- Murray, creo que sería necesario que te hicieras cargo de los mandos de la nave.
- Ya voy ya voy ... por dios dame un segundo. - Una vez hubo regresado del area sanitaria, introdujo las ordenes de maniobra en la consola de comandos y envió esas mismas ordenes al resto de las naves. Se levantó y se dirigió hacia la zona de carga, del reciclador. Apretó el boton que abre la escotilla de reciclaje, y contempló con incredulidad como caian unos cuantos trozos de cristal fundido.

- ¿Y ya esta?, que coño es esto ¿una broma? - Accionó el boton que abre la exclusa de la zona de carga y bajó por la escalera metalica que concucía al fondo de la bodega. Una vez allí, inspeccionó los restos de cristal fundido, que acababa de recolectar. No había duda, eran los restos de una sonda. Abandonó la zona de carga de la nave y se dirigió a la cabina de pilotaje, encendió el intercom y le habló al resto de la flota.

- Nos han jodido chicos, esos mamones del centro de mando nos han mandado unas coordenadas incorrectas. Creo que ya lo habeis comprobado por vosotros mismos.
- Teniente, intenté avisarlo. Justo cuando salimos del hangar, intenté decirle que las coordenadas que aparecían en mi consola, no eran las mismas que estaban escritas en el tablón de ordenes, pero usted cortó las comunicaciones, y no pude advertirselo. Debería tener 4 o 5 mensajes en la bandeja de entrada de su consola teniente. Son míos, pero no he recibido contestación a ninguno.

Daba la sensación de que Murray había recibido una descarga de un plasma, no era capaz de articular ninguna palabra, no era capaz de hacer nada que no fuese quedarse ahí quieto, y desear que un agujero negro se abriese justo delante y se tragara su reciclador con el dentro.

- ¿Señor?, ¿esta usted ahí?


Se levanto, y se dirigió al compartimento de ocio de la nave, allí encima de una mesa, estaba la hoja de papel donde estaban anotadas las coordenadas "8:210:9" y las comprobó con las coordenadas introducidas en la consola "8:210:8" - Mierda !!! - Un sudor frio recorrió la espalda de Murray, su pulso estaba disparado y le temblaban las manos.

- Murray te encuentro muy raro en esta misión, ¿seguro que tu sistema de soporte vital funciona bien?
- Si Tarko, perfectamente.

Pulsó el botón del intercom y dió las ordenes de regreso a casa a su escuadra. No podia dejar de pensar en lo que le diría al Comandante, cuando este leyera el informe de la recolecta en el campo de escombros. Caminó con paso tembloroso hacia el area sanitaria y cogio una botella de alcohol etílico, arranco el tapon de un mordisco y vació la mitad de la botella en la taza del retrete. Despues abrió el grifo del agua y rellenó lo que faltaba de la botella. Se dirigió a la cabina de mando, introdujo las coordenadas de regreso y se desplomo sobre el asiento del piloto. Y bebió ... largos tragos de esa sustancia asquerosamente insipida, notando como poco a poco iba quemando primero su garganta y luego su estomago.

- Murray, no creo que eso te siente muy bien.
- Al contrario Tarko, me va a sentar muuuy bien.



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